Jesús de Nazaret
VI.1.1.3. Continuidad social. De la Resurrección de Jesús a la actualidad. Segundo.
Partimos de la Revolución Francesa, finales del siglo XVIII.
La Revolución Francesa (el pueblo contra el poder) elimina la Nobleza… Las autoridades eclesiásticas tenían muchísimo poder político. Pasó la revolución. Llegó Napoleón. Se hizo coronar emperador por el Papa. Cayó en Waterloo. Siguieron las revoluciones…
En el siglo XIX aparece el comunismo. Democracia popular. La Nobleza y la Burguesía tienen el capital que explota a los trabajadores: pagan lo menos posible por el mayor trabajo posible. Hacia el final de la Primera Guerra Mundial, 1917, triunfa la revolución comunista rusa. La «dictadura del proletariado» proclama que «la religión es el opio del pueblo». Dios es un invento de los curas para mantenerlo sometido. En Rusia queda suprimida oficialmente la religión.
En España, la Guerra Civil, de 1936 al 39, comunistas y socialistas van contra la Monarquía y sus apoyos, uno de los cuales es el clero… «Oler a cera» era mortal. En el bando nacional ser de izquierdas era también mortal. Siempre razones ideológicas.
Del 1940 al 46 Europa se desangra en la Segunda Guerra Mundial. Los bandos no coincidían exactamente con las ideologías. Acaba la guerra de las armas en 1946. Continúa la guerra de las ideologías: liberalismo capitalista contra comunismo. Continúa la Guerra Fría entre los USA y Rusia. La Guerra Fría se extiende al mundo entero. Es también lucha por el poder. Donde triunfa el Comunismo, hay declarada persecución de cristianos. En el otro bando, hay tolerancia.
En todas partes se va imponiendo la «autonomía del Hombre» frente a Dios y, por tanto, frente a la religión. De otra forma: Los seres humanos podemos y debemos regirnos, auto-nomía, por normas o «leyes humanas propias», no por «leyes religiosas». Los ámbitos político y religioso son diferentes. Deben convivir.
En realidad el tema está en los evangelios: «Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios». En demasiadas ocasiones se mezclaron los dos ámbitos.
En la actualidad, la ideología laicista está convirtiéndose en fundamentalismo ateo. Pretende hacer desaparecer todos los signos externos religiosos. Aparte que es imposible borrar la historia, los creyentes también son ciudadanos.
El gran problema cristiano actual no es el laicismo, sino la «flojera religiosa» de una parte muy importante de los que nos decimos cristianos.
El Islam no separa los dos poderes. Esta es una gran dificultad para el entendimiento entre todos los pueblos.
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Padre nuestro, que estás en el cielo; Danos hoy nuestro pan de cada día. Amén |
Dios te salve, María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo. Santa María, Madre de Dios, Amén |
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Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. |
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