II.2.2.01. San Mateo. Nacimiento de Jesús.
Damos la narración de San Mateo en dos «momentos».
Al escuchar estas narraciones no debemos olvidar que los evangelios no son crónicas sino confesiones de fe de las primeras comunidades cristianas. Los miembros de la comunidad de San Mateo eran hebreos. La Biblia era su referencia cultural y religiosa necesaria. Lo normal en su época. Para las gentes del Imperio, las leyendas de sus dioses eran mucho más que historietas: eran representación y explicación de los fenómenos naturales y sociales que observaban. Para los cristianos de la comunidad de San Mateo, contar el nacimiento de Jesús ajustándose más a las «revelaciones» que a los hechos tal como ocurrieron era confesar y enseñar que Jesús era el Cristo, el Mesías esperado.
El gran libertador-salvador del pueblo hebreo y figura prominente del Mesías Salvador definitivo fue Moisés. Tras la resurrección de Jesús, los cristianos confiesan que ese Mesías esperado era Jesús. Hacen esta confesión de fe narrando la aparición de Jesús-Mesías-Cristo en la tierra en paralelo a la historia de Moisés: salvado de las aguas y de la iniquidad de un rey, acogido por reyes, huido de su tierra, vuelto a ella, cabeza y guía a través del desierto de los liberados, etc.
Primera parte:
«La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo. Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Así lo tenía planeado, cuando el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.»
Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta: «Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Enmanuel», que significa: «Dios con nosotros.»
Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado, y tomó consigo a su mujer… Ella dio a luz un hijo, y le puso por nombre Jesús.
Padre nuestro, que estás en el cielo; Danos hoy nuestro pan de cada día. Amén |
Dios te salve, María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo. Santa María, Madre de Dios, Amén |
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. |