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Jesús de Nazaret

Jesús de Nazaret

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Desde: 24/09/2015

II.1.1.18. Rezando con María su y nuestro Magníficat.

Recordemos las circunstancias en que, de lo más íntimo de María, brotó el himno de acción de gracias que llamamosMagníficat (por su primera palabra en latín).

El ángel Gabriel dijo a María, como prueba de que «para Dios nada hay imposible», que su prima Isabel, ya mayor, estaba embarazada de seis meses. La reacción «normal» de cualquier persona sería ver en la inspiración del ángel un pensamiento absurdo. Pero María creyó esa posibilidad, porque «su Dios lo quería así»Mostró una fe y confianza en Yahvé sin límites… Ella no era más que «una esclava de su Dios»

No se quedó ensimismada con su secreto. Su prima Isabel necesitaría ayuda. Caminando o en burro allá se fue María a la montaña de Judá donde vivía su prima. Tres jornadas de camino… Hacer noche en algún sitio abrigado, etc. Fue dispuesta a ayudar cuanto antes («salió de prisa»).

Isabel «grita» una alabanza a María: «¡Bendita tú entre todas las mujeres, porque has creído!»… Te distingues entre todas ¡porque has creído! Te has fiado de Dios, sin entender nada, exponiéndote a la burla. Añade una confesión de fe: María es la Madre de su Señor«. ¿De dónde a mí tanta dicha que venga a visitarme la Madre de mi Señor?

Como respuesta de María, San Lucas pone en su boca el magníficat. Al rezarlo intentemos meternos en el alma de nuestra buena Madre María para rezar con ella y ¡hasta gritar! las alabanzas al Señor. La canción de Kairoi recoge el canto de María casi tal como lo narra el evangelio.

MAGNIFICAT

Uh, uh, uh, uh, uh, uh, uh…

Proclama mi alma la grandeza de Dios,
se alegra mi espíritu en Dios mi salvador,
porque ha mirado la humildad de su sierva.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones.

PORQUE EL PODEROSO HA OBRADO,
Y HACE MARAVILLAS EN NOSOTROS,
GRANDE ES SU AMOR PARA TODOS,
GRANDE ES SU AMOR Y POR SIEMPRE,
GRANDE ES SU AMOR…

Uh, uh, uh, uh, uh, uh, uh…

Hace proezas con su brazo,
corrige a los soberbios y con todo el corazón
ensalza a los humildes, llena de bienes a los pobres.
Su promesa por siempre durará como dijo a nuestros padres.