III.4.6.14. La sal desalada ¿cómo volverá a dar sabor?
Jesús dijo que «tenemos que ser la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve insípeda ¿cómo podremos devolverle el sabor»?
Los judíos conocían bien el fenómeno de «la sal desalada». Sus reservas de sal estaban en el Mar Muerto. Sabían bien que cuando la sal se iba mezclando con otras sales y tierra y restos de plantas y animales llegaba el momento que ya no valía para dar sabor.
Cuando los cristianos hablamos de la esperanza en el más allá y tenemos puesta alma, vida y corazón en el más acá… por más que hablemos, no daremos sabor ninguno a nuestro entorno.
Es difícil señalar qué momentos fueron los mejores y los peores de la Iglesia. Pueden valer afirmaciones genéricas. Por ejemplo, los peores momentos de la Iglesia nunca han sido los de persecuciones («La sangre de los mártires es semilla de cristianos»). Han sido momentos muy malos cuando los Papas estaban metidos de hoz y coz en intereses políticos y económicos. En momentos tan «brillantes» saltó por los aires la unidad de los cristianos de Occidente con la Reforma Protestante. Es cierto que siempre hubo, ¡y hay! cristianos de verdad y santos de altar… Nunca se agotó la sal; pero los barros de la tierra se mezclaron con ella hasta ser difícil a muchas personas reconocer el «sabor cristiano de la vida».
¿Cómo «resalar» la sal? Para un químico, fácil; quizá costoso. Para resalar la sal cristiana, más difícil. Con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud, JMJ-agosto 2011, el Papa dio alguna pista: «… es vital tener raíces y bases sólidas… especialmente hoy, cuando muchos no tienen puntos de referencia estables para construir su vida… El relativismo que se ha difundido, y para el que todo da los mismo y no existe ninguna verdad ni un punto de referencia absoluto…».
«Relativismo»: no existen valores supremos Justicia, Verdad, Libertad. Todo depende, «es relativo», de la opinión de los gobiernos elegidos democráticamente. ¿Tenéis idea de las «lindezas» realizadas en el siglo XX con ese relativismo? Un ejemplo: La «solución final» de exterminar a los judíos fue tomada por un gobierno que tenía mayoría… En Alemania y en toda Europa había muchos cristianos… ¿Estaba desalada la sal?
¿Y qué está pasando ahora mismo en España? Hay mucho que pensar… ¡y comprometerse!
Padre nuestro, que estás en el cielo; Danos hoy nuestro pan de cada día. Amén |
Dios te salve, María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo. Santa María, Madre de Dios, Amén |
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. |