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Jesús de Nazaret

Jesús de Nazaret

StatPress

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Desde: 24/09/2015

I.2.1.03. El mal: ¿Cuál es el origen del mal que padecemos los hombres?

Sobre «el mal» piensa todo el mundo. Sistemáticamente lo hacen filósofos, sociólogos, moralistas, etc. Incluso hay teorías que le dan status de “principio” de la existencia en general y de la humana en particular.

En la Biblia, recogiendo otras leyendas orientales, se habla del “pecado original”, presentado como desobediencia a Dios por soberbia humana: la tentación del demonio no fue “tendréis de todo”, sino “seréis como dioses”. Cayeron en la tentación. Enseguida la envidia (una especie de soberbia negativa) entre hermanos, Caín y Abel, terminó en la tragedia de un asesinato fraterno. La Biblia recoge un mito antiquísimo, pero de una exactitud impresionante.

Pensemos en la existencia del mal entre los hombres ¿Alguien duda de que los productores más efectivos de semejante «mercancía» somos precisamente los Seres Humanos? ¡Y vaya fábrica!

Pero ¿cuál o qué es la causa del mal? Entre los animales hay violencia; los naturalistas dicen que esta “ley de la selva” es necesaria para mantener el equilibrio ecológico. Pero ¿cuál es la causa de las guerras casi continuas entre los pueblos africanos? ¿Es porque son unos salvajes sin cultura? Si alguien se cree eso, tendrá que explicar el porqué de las guerras más exterminadoras de seres humanos ocurridas en el tan “avanzado” siglo XX, precisamente en el mundo «nada salvaje” de la cultura occidental.

Parece evidente que el mal aparece “hasta en la sopa”. Empecemos por nosotros mismos. Dos paquetitos de preguntas con solicitud de respuesta:

  1. Cuando me siento mal, cuando siento que mi conciencia me grita que lo que hice o voy a hacer es una maldad ¿cuál es la verdadera causa? ¿Qué me induce a comportarme así?
  2. Cuando vemos a amigos o familiares, incluso a nuestros padres o hermanos, enzarzados en discusiones, amenazas, poniéndose a parir unos a otros, tratando de hacerse las peores faenas, … sufriendo desde luego… preguntémonos: En el fondo, en el fondo ¿por qué?  ¿cuál es la causa? ¿cuál sería el remedio? Incluso en el supuesto de que hubiese algún culpable evidente ¿no podría evitarse gran parte de ese sufrimiento? ¿cómo?

¿Seguirá alguien dudando de que los seres humanos necesitamos «salvación»?

¿Nos traerá la ONU «esa» salvación?

¿Será la Ciencia, la Tecnología?

¿Lo conseguirán los políticos?

Quizá sea el momento de rezar gritando en nuestro interior:¡VEN, SEÑOR JESÚS! ¡VEN Y SÁLVANOS! ¡TE NECESITAMOS, JESÚS!

¡PADRE! ¡PADRE! ¡PERDÓNANOS! ¡TEN PIEDAD DE NOSOTROS!

Merece la pena ver ¡y pensar! lo que se dice en este vídeo. Tener en cuenta que procede del ámbito psicológico, no cristiano.