IV.5.7.00. Descendimiento de la cruz. Himno «Stabat Mater»
Dice San Juan:
«Los judíos, como era el día de la Preparación, para que no quedasen los cuerpos en la cruz el sábado – porque aquel sábado era muy solemne – rogaron a Pilato que les quebraran las piernas y los retiraran. Fueron, pues, los soldados y quebraron las piernas del primero y del otro crucificado con él. Pero al llegar a Jesús, como lo vieron ya muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza y al instante salió sangre y agua. El que lo vio lo atestigua y su testimonio es válido, y él sabe que dice la verdad, para que también vosotros creáis…».
Los crucificados vivían dos o tres días. Sufrimiento espantoso. Sus gritos aterrorizaban a la gente. A fin de cuentas, ese era el objetivo de castigo tan cruel, atemorizar a la gente de los pueblos dominados. Pero Jesús tardó sólo unas tres horas en morir en la cruz, debido a la tortura previa de la flagelación. Era el atardecer. Romper a mazazos las piernas de los crucificados era otra crueldad añadida. Los huesos rotos duelen espantosamente; estando colgados de la cruz, este dolor tenía que ser insoportable.
Las imágenes de La Piedad o de La Dolorosa expresan intensamente la tragedia inhumana del dolor moral más cruel: impotencia, brutalidad, injusticia… y del amor incomprensible de Dios hacia nosotros. En el vídeo siguiente escribimos la traducción al español sobre la música gregoriana y la letra en latín. Escuchar, contemplar, pensar… ¡ y rezar! (Vídeo Stabat Mater. )
Stabat mater dolorosa Cuius animam gementem, O quam tristis et afflicta Quae moerebat et dolebat, Quis est homo qui non fleret, Quis non posset contristari, Pro peccatis suae gentis Vidit suum dulcem natum Eia Mater, fons amoris, Fac ut ardeat cor meum |
Estaba la Madre dolorosa Su alma gimiente, ¡Oh cuán triste y afligida Languidecía y se dolía ¿Qué hombre no lloraría ¿Quién no se entristecería Por los pecados de su gente Vio a su dulce Hijo Ea, Madre, fuente de amor, Haz que mi corazón arda |
Sancta mater, istud agas, Tui nati vulnerati, Fac me tecum pie flere, Iuxta crucem tecum stare, Virgo virginum praeclara, Fac ut portem Christi mortem, Fac me plagis vulnerari, Flammis ne urar succensus Christe, cum sit hinc exire, Quando corpus morietur, |
Santa Madre, yo te ruego De tu Hijo malherido Déjame llorar contigo Junto a la Cruz contigo estar Virgen de Vírgenes preclara Haz que llore la muerte de Cristo, Haz que me hieran sus llagas, Para que no me queme en las llamas, Cuando, Cristo, haya de irme, Y cuando mi cuerpo muera, |