¡¿Jesús de Nazaret?! ¡Ah, sí!

La entrada de Jesús en Jerusalén a lomos de un borriquillo fue un acto muy significativo para las autoridades judías. Para la Guardia Romana no pasaría de una procesión religiosa más. Pero el hecho está cargado de significado en la vida, muerte y mensaje de Jesús. Narra San Mateo.

«Cuando se aproximaron a Jerusalén, al llegar a Betfagé, junto al monte de los Olivos, envió Jesús a dos discípulos, diciéndoles: «Id al pueblo que está enfrente de vosotros, y enseguida encontraréis una asna atada y un pollino con ella; desatadlos y traédmelos… Trajeron el asna y el pollino. Luego pusieron sobre ellos sus mantos, y él se sentó encima. La gente, muy numerosa, extendió sus mantos por el camino; otros cortaban ramas de los árboles y las tendían por el camino. Y la gente que iba delante y detrás de él gritaba: «¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!» Y al entrar él en Jerusalén, toda la ciudad se conmovió. «¿Quién es éste?» decían. Y la gente decía: «Este es el profeta Jesús, de Nazaret de Galilea.» (San Juan añade una anécdota: Algunos fariseos que se hallaban entre la gente le dijeron: «Maestro, reprende a tus seguidores». Pero Jesús les contestó: «Os digo que si éstos se callan, las piedras gritarán».)

Jesús sabía a qué se exponía haciéndose notar en Jerusalén. Era imposible que no molestase al staf judío. No corre tras la muerte, pero tampoco se echa atrás.

Su muerte será la síntesis de lo que fue su vida. Las aclamaciones del pueblo son proclamación de su condición deMesías. Lo es, pero no como la gente piensa; sino al modo «del insondable misterio del amor de Dios desde toda la eternidad» (San Pablo) . Jesús molesta al staf judío porque el pueblo le sigue aunque no sepa muy bien por qué. Formar un foco de rebelión sería fácil. Es el peligro que ve el satf. Tiene que morir, pues, ¡y cuanto antes!

Jesús no rechaza las aclamaciones de «Hijo de David» (en contexto bíblico, proclamarlo Mesías). Tenía que proclamar el verdadero sentido de su mesianismo a toda costa. Quedará muy claro tras su Resurrección.

Vídeo: Jesucristo Superstar, entrada en Jerusalén. Téngase en cuenta que esta película es ópera rock. Productor y director de la película son judios. En modo alguno tratan de reproducir ambientes históricos; en todo caso serían escenarios psicológicos llenos de simbolismo. Ejemplo: El «staf» judío aparece siempre sobre andamiajes, «la estructura social» sobre la que se mueven.